No todo es arquitectura. Ya sea por trabajar con otro tipo de clientes, como agencias de publicidad o por consideraciones de proyecto (como ocurre con diseño de mobiliario en trabajos de interiorismo), a veces dejamos de lado los espacios (contenedores) para centrarnos en los objetos (contenidos). Los criterios a veces difieren, a veces son los mismos. Lo que está claro es que entran variables en juego como la iluminación de estudio, el tratamiento del fondo o la composición de elementos que en infoarquitectura no se tratan de igual manera porque vienen, en gran parte, definidos por las formas.
Por tanto, gradualmente pasamos de la arquitectura al diseño.
La mayoría de catálogos de mobiliario usan 3D en vez de fotografías, ya que les permite probar colores, composiciones y estancias con mayor facilidad, aparte de añadir prototipos o elementos que aún no están listos para la venta. Alguna de las situaciones que han surgido en los encargos correspondientes a las imágenes que tenéis aquí arriba:
Como parte del proceso que comentaba anteriormente, a veces hay que jugar y experimentar, para conocer mejor las propiedades básicas de cualquier trabajo de diseño: luz, color, textura y composición.
Incluso dentro de la arquitectura de nuevo, la diferenciación para por la experimentación.